Se le viene la noche a Luis Pinto Medel, secretario general del consejo de la Central de Abasto.
Apenas hace unas semanas, este lugar apareció en la lista de los “focos rojos” a atender de manera urgente en materia de narcomenudeo.
Las autoridades federales ya han puesto a la Central en el mapa de lugares de riesgo en donde existe una “alta probabilidad” de que ocurran enfrentamientos entre grupos de la delincuencia organizada.
Es decir, que ya es un espacio de alta rentabilidad entre quienes se dedican a la venta de drogas en medianas cantidades.
Un centro de distribución muy valioso en la estrategia de diversificación y crecimiento de estas bandas criminales.
Se trata de una realidad de sobra conocida, tanto adentro como afuera de esta importante unidad comercial, en donde es evidente que no sólo se distribuyen alimentos.
Han sido varios los locatarios que han alzado la mano para denunciar lo que ahí sucede.
Sobre todo por las noches y en aquellas horas de la madrugada previas al amanecer.
Curiosamente, se trata de los horarios en donde se da la mayor cantidad de hechos delictivos ahí, de acuerdo con declaraciones hechas por el propio Pinto Medel.
No es un asunto menor.
Para nada.
Autoridades poblanas han prometido que se sumarán con todo a la estrategia en materia de seguridad implementada por Claudia Sheinbaum.
Que está garantizado el trabajo conjunto entre los tres niveles de gobierno.
Ya vimos una probadita de lo que se puede lograr, con el desmantelamiento de un narcolaboratorio en el fraccionamiento La Calera de la capital poblana.
Se desarticuló así una importante célula del Cártel de Sinaloa que fabricaba fentanilo en el estado.
El tema fue de tanta importancia para mostrarle a la ciudadanía que hay resultados concretos en la lucha en contra de estas bandas, que el propio Omar García Harfuch lo presentó en la conferencia de prensa matutina de la presidenta de la República.
Y por lo mismo, vienen más, muchos más.
Cometen un error garrafal quienes piensan que los misiles apuntan a las células grandes, a los peces gordos y que por las presiones de las nuevas autoridades norteamericanas, el único objetivo es el fentanilo.
Para nada.
Claudia Sheinbaum ha destacado que el consumo de drogas en México palidece con respecto a la demanda que estas sustancias tienen en el mercado de los Estados Unidos.
Por lo mismo, es imperativo que no se disparen los indicadores en la materia a lo largo de su sexenio.
De ahí la insistencia de pegarle de manera directa a la cadena de distribución que integran, desde los medianos intermediarios, hasta quienes la hacen llegar al consumidor final.
Próximamente, la Central de Abasto poblana dará mucho, muchísimo de que hablar a nivel nacional.
Y no para bien.
Ya lo verá.