Karina Fernández |
El gobernador electo Alejandro Armenta Mier consideró “ofensivo” que él y otros personajes sigan siendo vinculados con el marinismo, pues defendió que cada persona tiene su propia trayectoria.
Así respondió a las críticas por el nombramiento de ex funcionarios del sexenio de Mario Marín Torres, en su gabinete, siendo el caso más reciente el de Humberto Aguilar Viveros, como titular del Consejo Estatal del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
También por la designación del ex contralor Víctor Manuel Sánchez Ruiz como integrante del Comité de Participación Ciudadana del Sistema Estatal Anticorrupción.
Respecto que este último dijo que nada tuvo que ver, y calificó como una falta de respeto que la trayectoria de una persona se reduzca a la administración con la que colaboró.
“A mi me parece ofensivo que los llamen, nos llamen, como si fuéramos hijos de alguien o dueños de alguien; cuando esos que señalan se arrollidaron frente al marinismo, después frente al morenovallismo. Es incorrecto, cada persona es lo que en su historia ha tenido”, defendió.
Consideró que quienes han perdido sus privilegios, porque hacían negocios con ex gobernadores, están detrás de estos señalamientos, los mismos que en su momento no criticaron los excesos de pasadas administraciones.
“No dijeron nada, no levantaron la voz cuando hicieron el Museo Internacional Barroco por el que pasamos 14 mil millones de pesos, es una falta de respeto de quienes han perdido sus privilegios”, sostuvo.
En relación a la selección de la nueva presidenta de la Comisión de Derechos Humanos, dijo que conoció a Rosa Isela Sánchez Soya el año pasado, por lo que negó que sea un perfil cercano a él.
Dejó ver que, sin importar quien fuera designado al frente de dicho organismo autónomo, los opositores habrían fabricado algún tipo de vínculo con él para involucrarlo en las decisiones del Legislativo.