Karina Fernández |
La nueva presidenta de la Comisión de Derechos Humanos (CDH) en el estado, Rosa Isela Sánchez Soya negó afinidad con el gobernador electo Alejandro Armenta Mier o Morena, partido que postuló a su hija como diputada suplente.
Tras rendir protesta como ombudsman poblana, por un período de cinco años, que concluye el 7 de noviembre del 2029, Sánchez Soya defendió que tiene una trayectoria propia por lo cual garantizó que su labor será apartidista.
La abogada pidió el voto de confianza de los ciudadanos para demostrar resultados y no fabricar vínculos con políticos u otros personajes, tras comprometerse en brindar un servicio de calidad y trato digno a los poblanos.
“Nosotros traemos una trayectoria y yo siempre he estado en contacto con la gente y lo labor es para toda la sociedad, yo creo que ya hay que dejar ese tema por la paz para que me permitan trabajar y puedan ver mi trabajo y me conozcan como soy; todos tenemos derecho a ese voto de confianza y sobre esa línea me voy a ir”, abundó.
Dijo que llegará con su propio equipo al organismo, donde negó iniciar una persecución contra su antecesor, Félix Cerezo Vélez. Puntualizó que la evaluación de su trabajo y manejo del recurso público corresponde a otras instancias por lo que no será un distractor en su labor.
Congreso la elige a ombudsman por mayoría
Rosa Isela Sánchez Soya fue electa como nueva titular de la Comisión de Derechos Humanos con el apoyo de más de dos terceras de los diputados que integran la actual legislatura.
La abogada logró el apoyo de 35 de los 39 diputados presentes, mientras que cuatro prefirieron anular su voto y no otorgárselo a Marco Antonio Moreno Rosado, el segundo finalista, quien ya fue invitado a ocupar la Secretaría Técnica Ejecutiva de la comisión.
La Mesa Directiva del Congreso local llamó a la presidenta electa para que rindiera protesta al cargo, que desempeñará a partir de este miércoles 6 de noviembre hasta el 7 de noviembre de 2029, pues fue electa por cinco años.