Karina Fernández |
Alejandro Armenta Mier negó injerencia en el nombramiento del próximo titular de la Comisión de Derechos Humanos (CDH) del estado y presidencia del partido Morena, procesos distintos que se definirá los siguientes días.
En el primer caso, dijo que como gobernador electo no le corresponde hacer alguna sugerencia a los diputados respecto del perfil que debe cubrir quien defienda los derechos humanos de los poblanos, tras puntualizar que respeta la autonomía del Poder Legislativo.
“Yo no me atrevería a sugerir a los diputados porque ya fui legislador. Sería una vergüenza para mi querer, como gobernante futuro, sustituir, suprimir funciones legislativas donde a sus órganos les compete decidir”, dijo.
Cabe mencionar que, tras evaluar a los 12 finalistas del proceso, la comisión de Derechos Humanos del Congreso local propuso que Rosa Isela Sánchez Soya y Marco Antonio Moreno Rosado, sean votados por el Pleno el 6 de noviembre.
En el caso de la renovación de la presidencia del Comité Ejecutivo Estatal (CEE) de Morena, con la eventual incorporación de Olga Romero a su gabinete, negó intervención pese a ser militante activo.
Explicó que no tiene ningún perfil consejero debido a que el mismo se integró en tiempo del ex gobernador Miguel Barbosa; por lo que la mayoría de los participantes eran afines al mandatario.
“Yo no tengo ninguna correlación mayor a la de ser un militante activo de mi partido. No tengo un solo consejero, en términos reales, porque ese Consejo fue electo en la época en la que Luis Miguel Barbosa era gobernador”.
En este sentido, dijo que se mantendrá al margen del proceso interno de Morena, respetando la decisión que el Consejo Estatal tome el próximo 16 de noviembre cuando lleve a cabo su asamblea para cubrir las vacantes.
