Karina Fernández |
Eduardo Rivera no tiene los números ni el apoyo suficiente de panistas para convertirse en presidente nacional del PAN; a lo mucho, su trabajo le alcanza para ir en fórmula con otro perfil y negociar un lugar en el Comité Ejecutivo Nacional.
Así lo consideró el diputado local Eduardo Alcántara Montiel, quien observó que el ex candidato a la gubernatura podría gestionar la secretaria general del partido, yendo en fórmula con la diputada Adriana Ávila, para después negociar una cartera en la dirigencia nacional.
“Que Lalo Rivera busque la dirigencia nacional es una buena tomada de cabello, lo que busca es subirse a la mesa para negociar algo a nivel nacional, porque si la elección se diera por Consejo Nacional no tiene manera de llegar a ser presidente nacional”.
Cabe mencionar que, entre los panistas que se perfilan para suceder a Marko Cortés al frente del CEN, se encuentran la diputada Adriana Ávila, los senadores Kenia López y Damián Zepeda, y el coordinador parlamentario del PAN, Jorge Romero.
“Creo que (Lalo) está buscando ir en fórmula con Adriana Dávila, para de ahí ver qué obtiene y qué acuerda, y si Adriana Dávila acaba por contender en fórmula con alguien más, Lalo acabará pidiendo una posición de secretaría, yo no creo que le alcance para ser dirigente nacional”, comentó.
En el caso de Puebla, Alcántara Montiel observó que si la elección de la nueva dirigencia resulta del Consejo Estatal, el alcalde Adán Domínguez se perfilaría para asumir el cargo pues Eduardo Rivera tiene mayoría en dicho órgano partidista.
Consideró que ese fue el motivo por el que convocó a consejeros estatales el pasado fin de semana, aunque el presidente municipal lo negó, pues si bien todavía no hay una convocatoria abierta, cada aspirante comenzó a mover sus piezas.
