Karina Fernández |
El candidato a la gubernatura de Puebla de la alianza opositora, Eduardo Rivera Pérez alertó una escalada de violencia criminal y política en la entidad, luego de que presuntos sicarios lo amenazaron de muerte. Sus aspiraciones siguen firmes.
Fue la noche del sábado que el alcalde con licencia denunció una irrupción en el fraccionamiento donde vive, por sujetos que ingresaron al domicilio de sus vecinos preguntando directamente por él.
Del allanamiento a la vivienda próxima a su casa, madre e hija resultaron con lesiones físicas en rostro y cuello; mismas que habrían declarado que los sujetos preguntaban “por el político”, a quien pretendían recibir con “un balazo en la cabeza”.
“Ayer por la noche, lamentablemente esa preocupación se materializó en un ataque directo dentro del fraccionamiento donde vivo con mi familia (…) Denuncié la falta de condiciones de seguridad en el proceso electoral”, abundó
El panista dijo que su prioridad por el momento es la recuperación de los daños físicos de sus vecinas y su tranquilidad, así como el restablecimiento psicológico de sus familiares, afectados por los hechos de violencia en cuestión.
Advirtió que sus adversarios no lo van a intimidar con este tipo de acciones, mucho menos renunciar a su candidatura; “mi ánimo y mi determinación es continuar con esta lucha por un mejor Puebla y por un mejor México, para que todas las familias vivan sin miedo”.
Durante el posicionamiento que fijó ayer, sin permitir preguntas, Rivera Pérez se hizo acompañar de las dirigencias estatales de los partidos políticos que lo postularon, además de candidatos a distintos cargos de elección.
Consideró inadmisible otro tipo de interpretación que no sea una agresión con trasfondo electoral, por lo cual hizo un llamado “enérgico” al gobernador Sergio Céspedes y al presidente Andrés Manuel López Obrador para que cumplan con sus obligaciones institucionales de garantizar la paz en este proceso democrático.
“La cobarde agresión de ayer en el fraccionamiento donde vivo es una muestra evidente de que se trata de un atentado contra mi persona. No es admisible otra interpretación”, sentenció, tras recordar que su agenda de eventos sufrió ajustes este fin de semana.