Karina Fernández |
El diputado federal de Morena, Ignacio Mier Velasco se pronunció porque las multas por la pinta de mobiliario urbano se apliquen a quienes se benefician de estas, en alusión a los personajes que se promocionan en estos espacios.
Señaló que a más de un mes de la emisión del decreto que prohíbe la pinta de mobiliario público con fines político- electorales, siguen realizándose estas prácticas sin que hasta el momento se conozca de la detención y castigo a los responsables.
En este sentido, planteó que los personajes que se benefician con estas pintas respondan por estas prácticas y afronten las multas superiores a los dos millones de pesos que establece el decreto y la legislación local.
“No es sólo un tema de estética, es de cuidado de nuestro equipamiento y mobiliario urbano. Ya están establecidas las sanciones, pues ya que las empiecen a ampliar porque el decreto establecía que era quien de manera directa o indirecta era beneficiado con la pinta”, apuntó.
Mier Velasco puntualizó que el cuidado de la ciudad es responsabilidad de los poblanos pero particularmente de los políticos y de quienes aspiran a gobernar el estado, puesto que uno de los personajes más promocionado en estas superficies es Julio Huerta.
“Imagínate, qué bonito ejemplo damos cuando pintarrajeamos, a parte fea, todavía fuera estética, fuera grafito urbano, bueno construyes murales, pero son pintas feas que hace que pierda valor la ciudad”, remarcó.
Libros de texto, un asunto político
Respecto a la polémica generada por los nuevos libros de texto y de los que el PAN solicita frenar su distribución, el morenista reconoció que se convirtió en un asunto político por los partidos de oposición.
Reconoció que su estrategia fomenta la violencia llamando a su destrucción, además de que no es la primera vez que se lanzan en contra de los libros de texto, pues hace décadas condenaron que plasmaran el aparato reproductor de niñas y niños porque atentaba contra las “buenas costumbres”.
En este sentido, pidió que pedagogos y expertos en educación sean quienes revisen y opinen del contenido de los libros para no atentar contra los derechos de los menores.
