Karina Fernández |
El secretario de Salud, José Antonio Martínez García reconoció que Puebla enfrenta un problema de desabasto de medicamentos por el Insabi, que se suma al déficit de más de 400 médicos especialistas en el estado.
En entrevista, tras la inauguración de la Unidad de Hemodiálisis en el Hospital General del Sur, el funcionario reveló que hay una presión de gasto adicional para la compra de fármacos que no son entregados en tiempo y forma por el Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) mediante la compra consolidada.
Reconoció que este problema en el surtimiento de medicamentos impide que dicho recurso público se reinvierta en infraestructura o equipamiento de hospitales en beneficio de la población.
“Presión de gasto, hay que buscar recursos y el gobierno del estado, obviamente si no me llegan medicamentos que son necesarios para salvar vidas pues hay que comprarlos y en efecto, hay un problema en el surtimiento de la compra consolidada que hasta el momento hemos recibido el 32 por ciento de lo que correspondía en el 2022”, reconoció.
A este problema se suma el déficit de médicos especialistas, tras informar que son más de 400 plazas las que necesitan atención en anestesiología, ginecología, pediatría, cirugía y medicina interna que no se subsanaron con la contratación de 119 profesionales por parte del Insabi.
“En la Secretaría de Salud teníamos un déficit de 560 especialistas. El Insabi contrató 119 y es lo que nos falta por conseguir, pero todos días intentamos buscar médicos que quieran ir a prestar sus servicios al interior del estado que es donde más padecemos”, dijo.
De los enfermos renales, el doctor Martínez informó que son más de siete mil personas que tienen este problema y requieren de un reemplazo cuyas necesidades se están cubriendo con las nuevas unidades de hemodiálisis.
Se prevé abrir estos espacios en los hospitales generales de Acatlán e Izúcar de Matamoros que se sumen a las que funcionan en los hospitales generales Norte y Sur, para el Niño Poblano, Tehuacán y Teziutlán.