Karina Fernández |
En el último año, la armadora de Volkswagen instalada en Puebla pasó del tercero al séptimo lugar nacional en producción de vehículos, resultado de los constantes paros técnicos por la falta de componentes como los semiconductores.
De acuerdo con el registro administrativo de la industria automotriz de vehículos ligeros a cargo de Inegi, de enero a abril, la planta ubicada en Cuautlancingo ha ensamblado 82 mil 399 unidades nuevas, que la enviaron a la séptima posición nacional en cuanto a volumen de producción.
En el primer cuatrimestre de 2021, la firma alemana había superado las 116 mil unidades ensambladas, que la llevaron a ocupar el tercer lugar nacional después de Nissan y General Motors.
La caída en su producción del 29 por ciento en lo que va de este año la llevaron a ocupar la séptima posición, superada no sólo por Nissan y General Motors, sino también por Toyota, KIA, Ford y Chrysler, todas con más de 85 mil vehículos fabricados.
Por el contrario, Audi de México mantiene un crecimiento sostenido en su producción con un aumento del 39 por ciento, pues entre el primer cuatrimestre de 2021 y el de 2022 pasó de 45 mil 843 a 63 mil 857 automotores.
Incluso, la firma que opera desde el municipio de San José Chiapa está detrás de los niveles de producción que registra Volkswagen, ocupando la octava posición.
En materia de exportación, la firma de los cuatro anillos reportó la comercialización de 53 mil 870 unidades fuera de México, casi un 25 por ciento más que en 2022; mientras que Volkswagen registró una baja del 17 por ciento.
