Por Shanik David
Al calificar como deleznable la postulación de Jorge Benito Cruz Bermúdez para ser magistrado del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), Luis Miguel Barbosa Huerta aseguró que esto es sólo una muestra más del sometimiento de los poderes del estado a los intereses de Rafael Moreno Valle Rosas.
Fue el pasado viernes que el gobernador José Antonio Gali Fayad envió al Congreso del Estado la terna para ocupar el espacio que dejará bacante el magistrado Manuel Nicolás Ríos Torres, en la cual se incluye a Cruz Bermúdez junto a María de los Ángeles Muñoz Cortés y Rubén Arroyo Bermúdez.
“Es la muestra de la descomposición del poder de aquí en Puebla”, sentenció el excandidato al gobierno del estado ante la posible llegada del actual dirigente del Partido de la Revolución Democrática (PRD) al TSJ.
Además, dijo que pone en evidencia que Moreno Valle es un “suprapoder” al que tanto el legislativo como el judicial están sometidos.
“Es lamentable que a la vista de todos y sin al critica de nadie se cometan este tipo de cosas”, insistió el también exmilitante del PRD.
Y si bien criticó esta postulación, evitó señalar si esto se trataría de un pago de favores políticos de parte del grupo en el poder ante el papel que jugó Cruz Bermúdez no sólo en el gobierno del estado sino en el manejo del PRD para favorecer al morenovallismo.
Hay que recordar que no existe restricción alguna para que algún dirigente de partido político sea nombrado magistrado del TSJ, por lo que el propio presidente de la Junta de Gobierno y Coordinación Política, Carlos Martinez Amador, dijo que el posible nombramiento de Cruz Bermúdez dependerá de su cumple o no con los requisitos necesarios.
Se prevé que sea antes de la primera semana de septiembre que se lleve a cabo una sesión extraordinaria del pleno del Congreso en la que se aprobaría este nombramiento.
