Por Shanik David
A una semana de los comicios, integrantes de organizaciones sociales y políticas, así como ciudadanos sin filiación partidista se manifestaron por las calles de la capital en contra del presunto fraude electoral que se ejerció para garantizar que Martha Erika Alonso Hidalgo llegara al gobierno del estado.
A pesar de las amenazas de la infiltración de provocadores para generar violencia, los participantes se organizaron de tal modo que se logró frenar cualquier incidente, sin embargo el riesgo latente de estos grupos de choque ocasionó que la afluencia fuera menor a la esperada.
Fue a las 10:30 que el contingente se concentró en el Paseo Bravo, para emprender camino hacia el Zócalo de la ciudad, donde realizaron un mitín casi de manera simultanea al acto en el que Alonso Hidalgo recibió su constancia de mayoría en el Instituto Electoral del Estado.
Los asistentes, que portaban mantas acusando algunos de los abusos cometidos durante el sexenio de Rafael Moreno Valle, pancartas con mensajes en contra de la imposición y el fraude, y hasta banderas de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) a pesar de que el partido decidió deslindarse de la movilización, lanzaron arengas en contra de los funcionarios electorales, a quienes calificaron como “lacayos” y “cómplices” del exgobernador y el grupo morenovallista.
“No estaríamos acá si no viéramos el fraude electoral del que fuimos víctima todos nosotros, no sólo los partidos políticos, somos los ciudadanos a los que nos violentaron nuestros derechos” expresó en el Zócalo Luis Soriano Peregrina.
El activista agregó que este tipo de escenarios se dan porque el gobierno pasa más tiempo vigilando a los ciudadanos que cumpliendo lo que marca la ley, por lo que exigió que se luche en contra de la violencia que se vive.