Por Shanik David
A más de un mes del asesinato del alcalde de Tlanepantla, Efraín García García, el Congreso de Estado concretó el nombramiento del nuevo presidente municipal que estará en funciones los últimos cinco meses de la administración.
Ante la negativa del suplente oficial del edil, Ciro Peláez Hernández, de asumir el cargo tras el homicidio del pasado 13 de abril, el cabildo propuso una terna al legislativo para que se escogiera al nuevo alcalde.
Dentro este proceso quedó seleccionado Lino Romero Posadas, quien fue delegado de la Secretaría General de Gobierno en el municipio y quien fue responsable de atender el conflicto que se vivió en esta comunidad hace unos meses que derivó en el cierre de la presidencia municipal.
Luego de rendir protesta ante el Congreso, el también militante del Partido Acción Nacional (PAN) afirmó que en la actualidad la situación en el municipio ya regresó a la normalidad, y presumió que en lo personal lleva ocho meses despachando en la Presidencia, pese a los reportes de que ésta permanecía cerrada hasta el asesinato de García García.
Además, reconoció que el municipio carece de policías, pues en la actualidad sólo se tiene 12 elementos que están en proceso de certificación, y aunque hay seis elementos de la corporación estatal que apoyan con las labores de seguridad, estos brindan atención en varios poblanos.
Sin importar esto, dijo que no ve “factores de riesgo” para desempeñar sus funciones en el corto período que le queda, en el cual le corresponderá coordinador las labores de entrega recepción con las autoridades electas.
“Trataré de hacer mi trabajo lo mejor posible y confiar en Dios de que todo salga bien en estos cinco meses, por el momento no pediré seguridad”, insistió.
Y aunque Romero Posadas llegó hace ocho meses a Tlanepantla como parte de sus funciones como delegado de la SGG, aseguró que esto no afectará sus funciones pues cuenta con el apoyo del cabildo para definir las acciones que tome la administración municipal.
