Por Shanik David
Cerca de la mitad de las agresiones que sufrieron los reporteros del estado de Puebla en 2017 se dieron en el marco de la cobertura de la problemática de robo de combustible, reportó la organización Artículo 19 en su informe anual “Democracia simulada: nada que aplaudir”.
En 2017, se registraron 26 ataques a periodistas en el estado, siendo la séptima entidad en el país con mayor violencia hacia los comunicadores, sólo por debajo de la Ciudad de México (78), Veracruz (51), Coahuila (41), Oaxaca (38), Guerrero (36) y el Estado de México (27).
De estas agresiones en Puebla, “al menos 12 ocurrieron durante coberturas ligadas al robo de ‘huachicol’ en la región”, se indica de manera textual en el informe.
Otros tres ataques a la prensa se dieron durante la cobertura de protestas sociales, quedando entre los ocho estados con más casos de este tipo.
En términos generales, las agresiones a los reporteros se dispararon durante el sexenio de Rafael Moreno Valle, y al término de éste la tendencia volvió a bajar.
Esto pues por ejemplo, en 2009 se fijó un máximo histórico de nueve casos identificados, e incluso para 2013 sólo se reportaron tres incidentes; para el año siguiente Artículo 19 documentó 16 ataques a reporteros en el estado.
Un año después, en 2015, el número se duplicó llegando a 38; fue en 2016 cuando se volvió a dar una baja considerable con sólo 28 agresiones.
En el informe de la organización internacional además se hace una mención puntual sobre el caso de Chalchihuapan como un ejemplo de la criminalización de a protesta social durante el sexenio de Rafael Moreno Valle.