Por Alejandro Mondragón
Tanto sometieron los morenovallistas al tío Poncho Esparza en la rectoría de la BUAP que ahora se encuentra en plena luna de miel con los enemigos del ex gobernador de Puebla.
Primero le echó a su medio orgánico al operador panista, Eukid Castañón, a quien acusó de la autoría intelectual del robo de expedientes de una bodega de la institución.
Luego, apareció con su nuevo operador político, el dirigente estatal del PRI, Jorge Estefan Chidiac, en gestoría de fondos con el secretario de Hacienda, José Antonio Meade.
Y el pasado viernes se formalizó la alianza de la BUAP con el Centro de Estudios Espinosa Yglesias, encabezado por Enrique Cárdenas, uno de los más feroces críticos del endeudamiento oculto del morenovallismo.
Alfonso Esparza nada quiere saber del morenovallismo que dejó de tomarles las llamadas telefónicas y a la menor provocación presume que en sus próximos cuatro años la BUAP tomará un rumbo diferente (al sometimiento, censura y menosprecio de la autonomía universitaria).
El problema para el grupo de Moreno Valle es que el tío Poncho los tiene agarrados de los huevos.
Ellos crearon a este Frankenstein para ser el más abyecto rector de la historia de la BUAP que le quitaron de encima a la competencia, a los opositores.
A unos los jubilaron, a otros los exiliaron, pero el contrapeso que hoy requerirían no lo hay, porque ellos se encargaron de que no hubiera.
Tristeza debió darles a los morenovallistas que después de la acusación sin pruebas de Esparza a Eukid Castañón de haberse robado la información de la BUAP ningún medio o pluma aliada haya salido en su defensa.
Cuando se les pidió apoyo, la respuesta no tuvo desperdicio: tenemos acuerdo con Esparza.
Se vienen tiempos violentos en la BUAP.
Ya verán.
MALPIQUITA
Vaya, vaya, después de 4 años del asesinato de Samuel Malpica su hijo se da cuenta que la justicia no ha llegado y exige a la Fiscalía que cite a comparecer a este reportero por difundir información previa a la ejecución de su papá.
Está bien, pero no sería más sensato reclamar la presencia de los universitarios fieles a Enrique Agüera, donde estaba Esparza, para que se les investigue y de paso solicitar la renuncia de Víctor Carrancá de la Fiscalía por incompetente.
Dice la cría de Don Samuel Malpica que ya pidió mi comparecencia, ojalá me manden a traer para exigir la apertura del expediente, donde viene lo narrado en este espacio hace unas semanas, pero además requerir también la presencia de todos los involucrados.
Habrá que ver si la Fiscalía ya mandó a traer de Miami a Agüera o al Oso de los antros que maneja en Playa del Carmen.
Si me citan, la comparecencia será transmitida en vivo, falta más.
