Por Shanik David
Hasta el momento se mantiene el problema del desabasto de combustible en el estado de Puebla, pues Pemex Logística no abastece al 100 por ciento a las estaciones de servicio que hay en la región, sino que les distribuye lo mínimo necesario para operar.
Sin embargo, este problema no se tiene en todas las gasolineras que operan en el estado, pues cerca del 10 por ciento de éstas sí reciben un abasto total, mientras que el resto se tiene que ajustar a un esquema racionalizado definido unilateralmente por la paraestatal, comentó Luz María Jiménez, presidenta de la Asociación de Gasolineros Unidos de Puebla y Tlaxcala.
Este mecanismo de racionalización del abasto se debe a la falta de gasolina en la región, ocasionada por la ordeña de ductos de Pemex que se ha salido de control por la falta de atención de parte de los tres niveles de gobierno, comentó la empresaria.
En el mejor de los casos, continuó, una estación de servicio se puede quedar ocho horas sin combustible, pero hay zonas del estado donde pasan de tres a ocho días sin que les lleven el producto, lo cual a la larga representa una pérdida para los operadores de las gasolineras.
“Tenemos un racionamiento brutal, bárbaro, sólo cuando les comprobamos que ya estamos en ceros o a unas horas de quedarnos en cero nos abastecen, este frágil equilibrio provoca que un gran número de estaciones se queden sin combustible”, lamentó la representante de gasolineros.
Reiteró que de acuerdo con las explicaciones dadas por los directivos de la paraestatal, la alta incidencia del robo de combustible ha provocado el desabasto, pues se ha reducido la cantidad de producto que se transporta por medio de los ductos para evitar pérdidas, lo cual no es la solución para este problema.
“Aunque el ducto es propiedad federal, el estado no se puede hacer a un lado ni los municipios porque el perjuicio que se genera por la falta de producto afecta a todos por igual”, insistió.
El desabasto no es el único factor de riesgo que tienen los gasolineros para este año, sino que como parte del ajuste al precio de la gasolina también se modificó el esquema con el cual se definen las utilidades que reciben los gasolineros por la operación de las estaciones de servicio.
Jiménez recordó que hasta finales de 2016 los gasolineros se quedaban con el 6.5 por ciento de las ventas como utilidad, pero ahora se estableció un monto fijo que se les pagará por la operación de las gasolineras, el cual no sería funcional pues con el paso de los meses se registrará un aumento en el costo de los insumos tales como la electricidad y salarios que deben pagar, lo cual pondrá a los empresarios en una situación precaria.
Por esta razón, lanzó un llamado a los ciudadanos que participan en las movilizaciones contra el gasolinazo a que tomen conciencia de que este aumento no fue definido por los empresarios sino por los diputados federales, por lo que en vez de tomar acciones en contra de los establecimientos que también se han visto afectados por esta medida gubernamental deberían orientar sus protestas hacia aquellos que aprobaron estos aumentos.