Por Shanik David
A un mes de que se llevó a cabo la asamblea en la cual se impuso a la nueva dirigencia del Sindicato Independiente de Trabajadores de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (SITBUAP) los agremiados acudieron a la Junta Local de Conciliación y Arbitraje para impugnar dicho proceso.
Fueron los propios integrantes del comité ejecutivo los que presentaron la denuncia ante las autoridades laborales, pues consideraron que el proceso se llevó a cabo de manera ilegal y es necesario que haya una elección transparente y apegada a la ley para la designación de la nueva representación sindical.
María Lidia López Negrete, secretaria de Formación y Capacitación de la dirigencia actual, explicó que esta fue una decisión que tomó el Consejo General de Representantes (CGR) por las irregularidades que se registraron el día de la elección.
Esto pues hay que recordar que el 14 de octubre pasado, en la reunión en la que se designaría a los nuevos líderes de la organización sindical, fue el propio Misael Mejía Pérez quien nombró a su sucesor sin importar la votación de los trabajadores, hecho que fue reprobado por los propios integrantes del equipo del líder sindical.
Fueron siete de los 11 integrantes de la dirigencia actual los que se negaron a firmar el acta de la asamblea por las irregularidades detectadas, por lo que ésta careció de validez.
Por esta razón se recurrió a la Junta Local para pedir que se ordene una nueva elección abierta, impugnación que lleva la firma de 116 integrantes del CGR, de tal manera que se pueda resolver la situación interna del sindicato, pues en la actualidad no se ha dado la toma de nota a la nueva dirigencia, por lo que sigue en funciones el comité encabezado por Mejía Pérez pese a que ya se cumplió su período.
López Negrete comentó además que ya se han tenido acercamientos con la rectoría de la BUAP, y aunque pareciera que esto no ha resultado fructífero la sindicalizada evitó hacer alguna critica directa hacia las autoridades universitarias.
Explicó que desde hace dos semanas entregaron a la rectoría un documento respaldado con las firmas de los integrantes del CGR, en donde se describen cómo se dieron los hechos el día de la asamblea, y con el cual piden “respeto a la organización sindical y que nos permitan llevar a cabo nuestros procesos internos”, medida que, dijo, se trato de una cuestión de respeto hacia la institución.
Sin embargo, pese a este oficio los trabajadores se vieron en la necesidad de recurrir ante al Junta Local para pedir la reposición del proceso de renovación de la dirigencia.