Por Shanik David
La pasividad con la que han actuado los diputados locales en torno a la exigencia de la legalización del matrimonio igualitario orilló a los activistas de la comunidad LGTTTBI a manifestarse durante la sesión extraordinaria del Congreso del Estado.
Fue al inicio de la sesión, cuando discretamente el grupo ingresó en el recinto legislativo y esperaron un momento de silencio en el pleno para sacar una amplia bandera de arcoriris y levantar la voz con consignas como “¡Todas las familias, todos los derechos!”.
Mientras los activistas realizaban su manifestación, los diputados de la fracción panista, quienes son los que se han negado a apoyar esta propuesta, evadían la mirada, jugaban con sus celulares o veían al frente, sólo de vez en cuando alguno aventuraba una mirada a veces temorosa, a veces con resentimiento hacia los que pedían el respeto de su derecho al matrimonio.
La protesta fue rápida, pero la bandera se mantuvo a lo largo de toda la sesión, con los jóvenes parados viendo a los legisladores pero sin llegar a confrontaciones o con actitud de agresión, por lo que incluso Pablo Rodríguez Regordosa, autor de la propuesta de llamar a la unión entre personas del mismo sexo “isomonio” tomó la palabra para dar la bienvenida a los inconformes y aplaudirles su civilidad.
Los activistas iban acompañados por Alejandro Pérez Pérez, secretario de Diversidad Sexual del Comité Ejecutivo Estatal del Partido de la Revolución Democrática, quien pasó banderitas de arcoiris a los diputados del sol azteca quienes las pusieron en sus lugares en solidaridad.
Es más, en una oportunidad que tuvo Socorro Quezada Tiempo subió a tribuna para pedir a los diputados que se tomen en cuenta las peticiones de la comunidad homosexual en Puebla, como es la legalización del matrimonio igualitario y el reconocimiento de la identidad sexogénerica, antes de que pase como con otros temas en los cuales ha sido necesaria la intervención de instancias nacionales para que sean atendidos.
Por su parte, Gabriela Cortés, representante de la organización El Taller señaló que la negativa que han mostrado los diputados en relación a este tema es una clara violación a los derechos humanos de las personas homosexuales, además de que criticó la postura que ha tomado el presidente de la Junta de Gobierno y Coordinación Política, Jorge Aguilar Chedraui al decir que porque no hay una mayoría legislativa el tema no se puede discutir.
La activista acusó que no se debe poner un derecho humano a disposición de una cuestión de las mayorías, pues esto representa una discriminación de los diputados hacia las personas homosexuales al no querer escuchar sus necesidades.
Señaló que por esta falta de legalización las personas homosexuales han tenido que recurrir a amparos para poderse casar, siendo este su caso pues tuvo que recurrir al porder judicial federal para poderse unir con su pareja.
“Si los legisladores tuvieran un poco de respeto hacia los derechos humanos no tendríamos ni por qué discutir esto (…) violan nuestros derechos humanos además de que es no reconocer ni los tratados internacionales ni la Constitución”, puntualizó la activista, al decir que si los diputados son tomadores de decisiones deberían escuchar a la sociedad para definir los temas que se tienen que considerar en la agenda.