Por Shanik David
La madrugada de este domingo Jairo Javier Montes Bautista dejó la cárcel de San Miguel, donde pasó poco más de 21 meses encarcelado por los hechos violentos del 9 de julio en San Bernardino Chalchihuapan.
Sin embargo, a pesar de haber pasado casi dos años de su vida en prisión, en su voz se escucha la calma de al fin haber salido y la emoción de regresar a su pueblo, del cual fue presidente auxiliar, y retomar su vida.
En una conversación telefónica, Montes Bautista describió su último día como reo de San Miguel y cómo incluso llegó a pensar que algo había salido mal y que podría no salir de la prisión.
Fue cerca de las 5 de la tarde cuando se le dio su tarjetón de salida, y se le hicieron las revisiones médicas de ley, que no tuviera tatuajes o que estuviera enfermo. Al pasar este trámite comenzó la espera, que se extendió hasta pasadas las 2 de la mañana.
Cuando salió fue recibido por su novia Pilar, quien incluso compartió la primera fotografía del exedil auxiliar después de su salida de prisión en su cuenta de Facebook.
Sin querer dar mucha información sobre su situación legal o el monto que se pagó de fianza -para no entorpecer los procesos, explicó-, Montes Bautista fue enfático al descartar las versiones periodísticas que se publicaron en los días previos a su liberación, que apuntaban a que se habría llegado a un acuerdo con el gobierno del estado para que dejara la cárcel.
“Me sentenciaron, es todo”, comentó al decir que no por esto “esté amarrado de pies y manos”, aunque todavía no define qué es lo que seguirá con su vida, pero que de esto podrá dar mayores detalles en los próximos días.
La sentencia que se le impuso al expresidente de Chalchihuapan fue de cuatro años y dos días, por lo que pudo compugnar su pena con el pago de una fianza, siendo con esto el último de los pobladores de la comunidad que dejan la prisión por las acusaciones que se les imputaron por la manifestación del 9 de julio de 2014.
Hay que recordar que fue el 21 de noviembre de 2014 cuando la entonces Procuraduría General del Estado detuvo a Montes Bautista en una comunidad de Izúcar de Matamoros, en cumplimiento de una orden de aprehensión que giró el 16 de octubre el Juez Tercero de lo Penal, por los delitos de tentativa de homicidio, privación ilegal de la libertad, motín y ataques a las vías de comunicación.