Por Alejandro Mondragón
El presidente Enrique Peña Nieto y su partido, el PRI, llevaron en el pecado la penitencia. Cría cuervos que te ganarán las elecciones.
No son Andrés Manuel López Obrador y Morena los enemigos a vencer, sino Margarita Zavala y el PAN. Ese es el real peligro para Los Pinos y sus aliados.
Acción Nacional gobernará 11 estados: Baja California Sur, Baja California Norte, Chihuahua, Durango, Tamaulipas, Aguascalientes, Guanajuato, Veracruz, Puebla, Querétaro y Quintana Roo. Nada más a 40 millones de mexicanos.
Y dispondrán de billones de pesos en presupuesto para generar el andamiaje del flujo de la campaña presidencial.
A Peña Nieto, el gobernador Rafael Moreno Valle le vendió la idea de la necesidad de crear una alianza patriótica que uniera al PRI, PAN, Panal, Verde Ecologista, Movimiento Ciudadano y PRD, a fin de detener el avance de López Obrador y Morena en el país.
Medio gabinete manejó esa hipótesis en el último año: Miguel Ángel Osorio Chong, Luis Videgaray, Aurelio Nuño, José Antonio Meade, Rosario Robles, José Narro, Ruiz Massieu, entre otros.
Está claro que la alianza patriótica permeó, porque después de las elecciones del 2015, Moreno Valle se volvió intocable en el gabinete de Peña Nieto.
Cada movimiento de Manlio Fabio Beltrones o Emilio Gamboa Patrón en su contra, era contrarrestado por Osorio Chong. Fue en Bucareli, por ejemplo, donde se firmó el acuerdo del Panal y PT para sumarse a la alianza de Tony Gali en Puebla.
En plena campaña, Hacienda adelantó la liberación de 350 millones de pesos al gobierno de Puebla, para futura comprobación.
El problema hoy es el resultado que pone al presidente Peña Nieto tras las cuerdas: el PAN le arrebató casi la mitad del país.
Y la alianza patriótica resultó la peor farsa desde el famoso virus del milenio Y2K o el chupacabras en el sexenio de Ernesto Zedillo.
Ahora sí se buscará impulsar a Morena para llevar la elección a la figura de tres tercios, donde el promotor de la alianza patriótica parece que también sucumbió en sus intenciones de llegar a Los Pinos.
Le vieron la cara a Peña Nieto.
Combatir a Morena, para que Acción Nacional se quede con medio país. Si no fuera trágico sería cómico para el PRI.
Que siga la generosidad presidencial con los gobiernos emanados del PAN. El partido blanquiazul lo tiene en la mira de echar oooootra vez al PRI de Los Pinos.
