Por Shanik David
El retiro de apoyos económicos, programas sociales y obras son algunas de las amenazas que han recibido presidentes auxiliares en las últimas semanas para obligarlos a que apoyen al candidato de la coalición Sigamos Adelante, José Antonio Gali Fayad.
Este escenario se da de manera generalizada en todo el estado pero de una manera más insistente en las 17 juntas auxiliares de la capital, aseguró Francisco Javier Jiménez Huerta, diputado por el Partido Revolucionario Institucional.
El legislador, quien ha trabajado muchos años con una asociación que lleva apoyos sociales, aseguró que el ambiente está “caliente” en las juntas auxiliares, pues las presiones que se han ejercido sobre los ediles auxiliares han hecho que se den fracturas en las estructuras.
Por ejemplo, comentó que en las juntas auxiliares del sur de la ciudad de Puebla, los presidentes auxiliares siempre tienen que participar en las reuniones del equipo de campaña de Acción Nacional, pero que el resto de los regidores y funcionarios auxiliares “jalan para otro lado”.
La amenaza más recurrente que se le ha hecho a los representantes de estas demarcaciones es que si no apoyan al candidato oficial se les retirarían los pocos recursos que se les asignan mensualmente para el pago de nómina o para la operación de las oficinas de la presidencia.
Sin embargo, dijo, no hay mucho con lo que los puedan amenazar “de por si a estas comunidades no llegan obras y programas, por lo que no les pueden quitar estos apoyos; es más ya no les pueden quitar ni el registro civil”.
Pese a esto, insistió en que la situación está complicada en las juntas auxiliares y que la molestia generalizada, en gran parte generada por estas presiones, podrían orillar a que los ediles tomen decisiones contrarias a lo que se les está ordenando.
Añadió que sería sólo por medio de una operación política muy puntual que Gali Fayad podría entrar a juntas auxiliares como San Miguel Canoa y la Resurrección, las cuales han sido de las más golpeadas durante la actual administración por el encarcelamiento de sus ediles, y aunque lo vio difícil por la molestia persistente no lo consideró imposible.
