Por Shanik David
El secreario general de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, René Valdiviezo Sandoval, amenazó directamente al director de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales, Carlos Moreno Sánchez, para que renuncie a su cargo, de lo contrario se abrirán procesos en su contra.
El abogado denunció esto tras una reunión a la que fue llamado a base de engaños, en la cual funcionarios de primer nivel fueron los encargados de darle la noticia de que tendría que renunciar.
Describió que, aunque tenía previsto acudir a un acto oficial en el cual estaría presente el rector Alfonso Esparza Ortiz y el gobernador Rafael Moreno Valle, se le avisó de una reunión con carácter de urgente en la oficina de la abogada general Rosa Isela Ávalos, en la cual, se le informó, se discutiría el tema de la nueva licenciatura en Ciencias Forenses.
Con este argumento, el director de Derecho acudió a la oficina de la abogada, pero para su sorpresa se encontró en el lugar a Valdiviezo Sandoval, el tesorero Oscar Gilbón Rosette y otros funcionarios; sin embargo procedió a hacer la exposición de los documentos para la validación de la nueva licenciatura tras lo cual se le soltó la amenaza directa.
Fue el propio secretario general, quien debería estar encargado de las relaciones internas de la casa de estudios, quien le mostró un documento que ya ostentaba su firma -aunque él aseguró categóricamente que nunca había avalado el mismo- por medio del cual presentaba su renuncia; de no respaldar su baja se iniciaría un procedimiento administrativo en su contra bajo el argumento de haber detectado anomalías en las últimas auditorías hechas sobre su gestión.
Molesto, Moreno Sánchez recordó que tan sólo hace unos días la contralora de la universidad, Martha Delong Carsolio, presentó su informe de labores, en el cual no mencionó ninguna anomalía detectada en las revisiones hechas en 2015, lo que implicaría que las autoridades universitarias recurrirían a falsedad de declaraciones y documentos con tal de obligarlo a renunciar al puesto.
Sobre cuál podría ser el trasfondo de la exigencia de su cabeza como director de la facultad, dijo desconocer qué podría motivar esta persecución en su contra, pues además de esta presión directa refirió que ha recibido amenazas de muerte en su contra y de su familia si no deja el cargo.
“No tengo aspiraciones por la rectoría, no es mi aspiración”, puntualizó el abogado quien dijo que su vocación es la academia y la investigación y que su nombre ha sonado para contender en la renovación de la dirección central de la casa de estudios no es algo que tenga en sus planes.
Por esta razón, responsabilizó directamente a René Valdiviezo Sandoval de cualquier cosa que le suceda en lo personal a él o su familia, o incluso acciones que se pudieran dar por medio de investigaciones administrativas.
Agregó que él desconoce por completo cualquier documento que se llegue a hacer público que refiera su renuncia, y que en caso de que esto se dé se trata de una falsificación vil de las autoridades universitarias.
Lamentó que como integrante de la comunidad universitaria por más de 20 años, ha sido desde su llegada a la dirección de la facultad en 2014 que le ha tocado vivir una serie de situaciones que no sólo son antiuniversitarias, sino en contra de los derechos humanos.
“Me han pedido demostrar mi institucionalidad con acciones que no representan mi concepto de institucionalidad”, reconoció, señalando de manera puntual al secretario general de la universidad de estas presiones.