Pues arrancó la temporada de caderas y espinazos.
Chivos que durante un año son sometidos en Tehuacán a una alimentación a base de sal, especialmente para estas fechas.
Tres son los lugares tradicionales de Puebla si está usted dispuesto a disfrutar la temporada.
El platillo no es barato.
Llega a costar hasta 450 pesos.
Pero si usted es de los tragones (as), pues le recomendamos tres sitios.
El Sombrero, ubicado en la 23 poniente y bulevard Atlixco. Ahí, el mole de caderas lo dejará noqueado.
Es de lo mejor.
La calidad incuestionable y, sobre todo, la atención. El Sombrero vale la pena.
Después aparece El Burladero, localizado en la 7 Norte No. 2207 es el sitio predilecto de la clase política, empresarial y periodística, para degustar el mole de caderas.
Ahí, acostumbra comerlo el exgobernador Mario Marín y familia en esta temporada.
Este tradicional restaurante tiene además diferentes opciones.
Unas deliciosas caderas al ajillo para empezar, acompañadas con guacamole y tortillas calientes.
El tercero de la lista, pero no por eso el último es La Conjura.
El restaurante -localizado en la 9 oriente, esquina con la 2 sur- ofrece hoy uno de los mejores platillos de la temporada.
Se trata nada menos que el mole de espinazo.
Este panzón ya tuvo la oportunidad de probarlo y realmente quedó más que satisfecho.
De entrada pruebe usted el espinazo a la mostaza. Es una delicia.
Este platillo es único.
Después ya deguste el mole de espinazo. Es con la receta tradicional.
Tiene un inigualable sazón que convierte a La Conjura en el mejor lugar para saborear en compañía de la pareja y los amigos en el sitio mejor evaluado por El Tragón para este platillo.
Existen otras opciones, pero en esta ocasión vale reiterar que si quiere probar el mejor mole de espinazo de Puebla vaya a La Conjura.
Una recomendación adicional es acompañar el mole con unos frijoles con queso de primera.
