Por Shanik David
A finales de este mes se vence el permiso que la Secretaría de Desarrollo Rural, Sustentabilidad y Ordenamiento Territorial (SDRSOT) dio para la construcción de la segunda torre del complejo residencial PuntAlta.
De acuerdo con el reporte de las aprobaciones de Manifiestos de Impacto Ambiental publicado por la dependencia estatal en su portal de transparencia, fue el 31 de enero de 2014 cuando se aprobó el informe preventivo para el desarrollo del complejo.
La autorización, registrada con el número de expediente SDRSOT/107/2014, fue expedida a favor de Desarrolladora de Espacios IMJC S. A. de C.V., para la construcción de la segunda torre departamental y un edificio de amenidades, por un período de 21 meses.
Sin embargo, aunque la estructura ya se encuentra levantada los trabajos todavía no concluyen a menos de un mes de que se venza el plazo autorizado por las obras.
Resalta además que la obra fue autorizada por la secretaría estatal con registro en San Andrés Cholula, pues el permiso se expidió justo después de que se aprobó el cambio de limites territoriales entre dicho municipio el municipio de Puebla, por lo que el permiso de construcción, debió haber sido expedido por la comuna cholulteca.
Si bien el proyecto residencial cuenta con los permisos ambientales, estos fueron otorgados bajo presión y hostigamiento hacia los responsables del área, según documentó Alejandro Mondragón en su columna de Al Portador.
Esto, pues el inmueble cuenta con una capacidad de 201 departamentos en una zona que no tiene permitida tal capacidad habitacional, además de que no se cuentan con las áreas verdes necesarias para un complejo de tales dimensiones.
Los pocos funcionarios de la SDRSOT que se opusieron a dar los permisos fueron separados de su cargo, como fue el caso de Assenet Lavalle Arenas, directora de Ordenamiento Territorial y Desarrollo Urbano, y el coordinador de Medio Ambiente, Benjamín Rosete Espinosa.
