A menos de 24 horas que se le dictó auto de formal prisión acusado por el delito de ataques a las vías generales de comunicación, el maestro Gilberto Maldonado Maldonado, secretario general del Consejo Democrático Magisterial Poblano (CDMP), recibió un reconocimiento por su labor docente.
El documento, que presentó el maestro en una rueda de prensa, tiene fecha del 15 de mayo, en el cual se le reconocen los 30 años de servicio a favor de la educación pública en México; en la parte inferior, además, se ostenta la firma del presidente Enrique Peña Nieto.
Este reconocimiento se emitió tres semanas antes de que las autoridades poblanas iniciaran una persecución penal en contra de Maldonado Maldonado, Miguel Guerra Castillo y Gamaliel Ávila, todos representantes de la disidencia magisterial en la entidad.
El representante del CDMP calificó esta situación como una incongruencia pues “por un lado emiten reconocimientos y por otro nos pretenden dar un trato que no corresponde, o no hay comunicación o se actúa por consigna”.
Añadió que incluso el 8 de junio, día en que se detuvo a Miguel Guerra al salir de una rueda de prensa en el Centro Histórico, los policías también habían ido por él, pero que por un hecho fortuito su automóvil se encontraba estacionado justo afuera del restaurante donde se encontraban, por lo que no tuvieron oportunidad de aprehenderlo.
Fue por medio del proceso de Miguel Guerra que los abogados descubrieron el proceso abierto en contra de Maldonado Maldonado y Gamaliel Ávila, quien forma parte de la promotora de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación en la entidad.
De esta manera, los abogados de Maldonado presentaron un amparo en contra de la orden de aprehensión, el cual ahora quedará sin efecto una vez que se notifique de manera formal el auto de formal prisión, tras lo cual se presentará un nuevo recurso.
En una situación similar se encuentra el maestro Ávila, pues incluso a los pocos días de la detención de Guerra elementos de la policía ministerial acudieron a la escuela donde él daba clases con la intención de arrestarlo, pero el docente se dio cuenta momentos antes y logró abandonar el inmueble; ahora, al igual que Gilberto Maldonado, cuenta con una suspensión definitiva como parte de un juicio de amparo, por lo que no puede ser arrestado.
Maldonado Maldonado aseguró que la activación de las ordenes de aprehensión en contra de los maestros, que forman parte de procesos penales abiertos en su contra por una manifestación llevada a cabo en septiembre del 2013, tiene un trasfondo meramente político y no de carácter penal.
“Habrá que revisar cómo el 8 de junio, un día después de la elección se da esto, o eran aires triunfalistas del gobierno federal o eran aires derrotistas del gobierno local ante su escenario que se le derrumbó por completo que aspiraba a llevarse el carro completo, al ver cómo estaba la situación decidieron activar estas averiguaciones previas porque sabemos que fue desde el estado”, señaló.
Esto, explicó, debido a que desde la manifestación de hace casi dos años, el entonces secretario General de Gobierno, Luis Maldonado Veneras, hostigó y amenazó a los docentes que participaron en la misma e incluso él mismo fue quien presentó las denuncias en su contra.
Sin embargo, apuntó que las denuncias carecen de sustento, y es que los propios trabajadores de las casetas han reconocido en sus declaraciones que fueron ellos mismos quienes levantaron las plumas para liberar el cobro a los automovilistas y que los maestros nada tuvieron que ver con esta decisión.
“Están sosteniendo esto con alfileres” refirió Maldonado Maldonado, aunque no descartó que el gobierno haga de las suyas para sustentar a como dé lugar las denuncias en contra de los líderes magisteriales.
