Al entrar a la recta final del proceso electoral, se comienzan a ver los primeros retos que tendrán los diputados federales, esto debido a que durante las campañas se pudieron dislumbrar necesidades de reformas a los códigos electorales.
En primer lugar, se necesitan generar mejores condiciones de equidad para los candidatos independientes, pues éstos reciben una menor cantidad de recursos que los partidos políticos tradicionales, lo cual recorta sus posibilidades de promoción, consideró Francisco Lobato Galindo, presidente de la Asociación Mexicana de Franquicias.
Explicó que esto pone a los ciudadanos que participan en la elección en una situación de clara desventaja, por lo que también se corre el riesgo de que pudieran recurrir a fuentes de financiamiento no lícitas.
“Es una cuestión de prevenir la infiltración de dineros de empresas lícitas e ilícitas” señaló Lobato Galindo pues, “al no tener presupuestos los candidatos independientes pudieran ser patrocinados por grupos de poder empresariales o del crimen organizado y sus acciones no responderían a las demandas de los ciudadanos que buscan representar sino de quienes los financiaron”, reflexionó.
Añadió que este no es un tema menor, por lo que es necesario que los nuevos legisladores tomen en cuenta esta situación con miras al proceso electoral federal de 2018.
Otro tema que se debe analizar en el pleno de la Cámara de Diputados, agregó el líder empresarial, es la eliminación de las diputaciones plurinominales, pues estos se han convertido en “premios políticos”.
Este tipo de candidaturas, las cuales no representan un beneficio real, sirven principalmente para generar tráfico de influencias, por lo que la sociedad debería exigir que esta figura sea eliminada el marco legal, apuntó.
Al hacer un análisis del escenario post-electoral, Lobato Galindo también comentó que los retos en puerta no son sólo legislativos sino sociales, pues ahora los ganadores y los partidos políticos tienen como obligación cumplir las promesas hechas a los ciudadanos para evitar conflictos.
Señaló que se corre un riesgo latente que si los ciudadanos no ven que el voto que le dieron a los candidatos no se ve reflejado en soluciones a sus necesidades esto podría desencadenar en movilizaciones sociales violentas, por lo que los partidos necesitan tener una postura de apertura y negociación para no orillar a los ciudadanos a este tipo de acciones.