o enviar seguir @ALFONSOESPARZAO para ver más tweets suyos.
¿Tan jodido anda el rector de la más grande universidad del estado (lo influyente y decente quedó atrás) que tiene que recurrir a esas prácticas pueriles para sumar seguidores o elevar su presencia en Twitter?
Y es que Alfonso Esparza tiene en esa red social:
Número de Seguidores: 9,825
Tuits: 1450
Seguidores falsos: 15%
Seguidores inactivos: 42%
Seguidores reales: 43%
Klout: 58
La creación de cuentas que dejan de funcionar para usarlas en campañas de promoción es un común denominador de las autoridades con presencia en redes sociales.
Esparza no es la excepción. Basta ver la nula interacción de él con sus seguidores para comprobarlo frente a las impresiones de sus tuits.
Sus operadores creen que ahora con la estrategia de sigue al rector de la BUAP y alcanzarán la felicidad, pero en realidad sólo reflejan lo barato de sus políticas de comunicación.
Quiero evitar la palabra pendeja, pero en verdad no puedo.
El colmo es que los estrategas de imagen del rector rueguen por un seguidor para Esparza.
Si en lugar de usar bots o trolls deja de actuar como El Tío Gamboín y se faja los pantalones ante la cada vez más lamentable pérdida de autonomía universitaria, otra cosa sería.
Se le respetaría en las redes sociales.
Hoy, es insoportable su entreguismo.