Los más de 40 policías que han sido despedidos en las últimas semanas se integrarán al movimiento conformado por los burócratas estatales que también han sido dados de baja, esto con el objetivo de realizar movilizaciones masivas en las cuales se denuncien los abusos de los que han sido objeto por parte de las autoridades.
Este lunes por la mañana se llevó a cabo una primera reunión de los trabajadores estatales despedidos, en la cual se planteó que, como una primera acción, se hará una manifestación este martes durante la inauguración de la línea 2 de la Red Urbana de Transporte Articulado (RUTA).
Además se conformarán comisiones de burócratas dependiendo de las áreas a las que se encontraban adscritos para que sean sus representantes en reuniones que se pudieran llegar a tener.
Esta comisión buscaría en los próximos días acudir al Congreso de la Unión para solicitar el apoyo de los legisladores federales.
Durante la reunión tomó la palabra Martha Rodríguez Salinas, quien fue despedida hace dos años sólo por haberse inscrito en el proceso de renovación de la dirigencia del sindicato de trabajadores, y aprovechó para llamar a los despedidos a organizarse, pues si hacen luchas aisladas no lograrán nada.
“No le tengan miedo a este desgraciado, sabemos lo peligroso que es pero no debemos tener miedo, por que está nuestra familia”, señaló la extrabajadora estatal, esto en referencia a posibles agresiones y amenazas que pudieran sufrir de parte de las autoridades.
Una estrategia que planteó la exsindicalizada es realizar una campaña de difusión en redes sociales en al cual se den a conocer los abusos de los que han sido objeto, con lo cual, además, se llame a los ciudadanos a no votar por los candidatos del gobernador, a quienes llamo “mercenarios del poder”.
En la asamblea también estuvieron presentes representantes de los policías que han sido despedidos por supuestamente no haber aprobado las pruebas de control de confianza, quienes denunciaron además haber sido objeto de amenazas de parte de las autoridades.
Paulina Azpiasu, vocera de los uniformados despedidos, explicó que aunque a mediados de marzo se tuvo una reunión con Mauricio Alvaradejo, director de Recursos Humanos de la Secretaría de Seguridad Pública estatal, desde entonces ya no se han tenido más reuniones.
El funcionario estatal dejó de responder las llamadas de los uniformados y los ha bloqueado de redes sociales por donde han intentando contactarlo, según comentó la expolicía.
Añadió que desde hace una semana las personas que han participado en el movimiento han sido seguidas por personas cercanas a la administración estatal, y que incluso una compañera suya recibió una llamada de extorsión en la cual le pedían una suma alta de dinero a cambio de liberar a su hija, aunque ella se encontraba bien.
Ante esto, los uniformados acudirán a la comisión Nacional de Derechos Humanos para presentar una denuncia formal y participarán en las movilizaciones que organicen los despedidos para exigir su restitución o su liquidación conforme a la ley, pues las autoridades les ofrecen poco más de mil pesos por cada año trabajado.
