La falta de información en el portal de internet del Congreso del estado, así como la falta de la institucionalización de criterios para la rendición de cuentas, llevaron a que el poder legislativo reprobara la evaluación hecha por el Centro de Investigación Espinosa Yglesias.
En el reporte correspondiente al tercer año de la LVIII Legislatura, se le puso una calificación de 4.2 puntos, en una escala de 10, a los integrantes de la anterior legislatura, al registrarse graves deficiencias en el funcionamiento del poder legislativo.
De manera general, el CEEY indica que “el presente reporte de evaluación da cuenta de un retroceso importante por parte del Congreso con respecto a los dos años previos evaluados, principalmente en lo relativo a la transparencia y rendición de cuentas.
En materia del Desempeño Institucional, que abarca las facultades de control y vigilancia, y las facultades y trabajo interno de las comisiones del Congreso, se impuso una calificación de 5.1, esto principalmente porque en el portal de internet se carecía de mucha de la información necesaria para hacer la evaluación, lo cual dificultó el análisis de los especialistas que participaron en el estudio.
Por otra parte, en el rubro correspondiente a la Evaluación Legislativa, la cual abarca el tipo de iniciativas que fueron presentadas, discutidas, analizadas y aprobadas se obtuvo un puntaje de solo 3.3.
En el reporte presentado este martes, se detalla que el principal trabajo del congreso fue en materia de aprobación de cuentas públicas, pero que iniciativas en materia de transparencia y rendición de cuentas, así como de justicia social el trabajo fue menor.
Se señala de manera puntual la aprobación de la iniciativa de la Ley contra la Discriminación, pues consideran que esta careció “de un trabajo legislativo serio, una falta de contextualización y una nula identificación de políticas públicas posibles a partir de su aprobación”.
Dentro del documento se indica que, a decir de los 22 especialistas que analizaron el actuar de los diputados locales durante 2013, la legislatura pasada no fue productiva “ya que la gran mayoría de las iniciativas fueron presentadas por el Poder Ejecutivo y no por los legisladores en lo particular o los grupos parlamentarios”.
