El diputado Carlos Martínez Amador, secretario general del PRD en Puebla, y el secretario General de Gobierno, Luis Maldonado Venegas, insistieron en que la posibilidad de que el PRD compita en el 2015 coaligado a otros partidos no se ha cerrado aún, pues el plazo para reportar las alianzas vence hasta el día de mañana.
Al respecto Martínez Amador insistió en que la dirigencia estatal de su partido apuesta por la coalición, esto después de que la líder estatal, Socorro Quezada Tiempo, asegurara en entrevista que no había acuerdo al interior de la dirigencia en ese sentido y que respetarían los tiempos y las decisiones del Comité Ejecutivo Nacional (CEN).
“Le hacemos un llamado a la dirigencia nacional para que se analice la política de alianzas, abiertos a cualquier instituto político, diciéndoles que en Puebla nos ha funcionando, explicándoles con números electoralmente como ha beneficiado al partido, y pidiéndoles que se privilegie los distritos donde haya perfiles de izquierda ganadores”.
Y explicó que en caso de que se concrete esta alianza pedirían como mínimo los distritos de Huauchinango, Izúcar y algunos de la capital poblana, pero no especificó cuantos o cuales de los cuatro en que se divide la angelópolis.
A la par se distribuyó a medios una carta firmada por Socorro Quezada y el propio Martínez Amador, con fecha del lunes 8 de diciembre, en donde se oficializa la petición del Comité Directivo Estatal.
En el documento se especifica que el PRD poblano pide al Comité Ejecutivo Nacional se considere la posibilidad de aprobar una alianza en el estado de Puebla, señalando que sería no solo con partidos políticos sino también con organizaciones y ciudadanos de a pie.
En tanto, Maldonado Venegas pidió esperar a que concluya el plazo para la definición de las alianzas, y descartó que en el Consejo Político Nacional se haya vetado esa posibilidad, como aseguró en días pasado la diputada federal Roxana Luna Porquillo. Aunque sostuvo que su partido es competitivo por si solo.
Sólo se irá el 10%
En tanto, el líder de la bancada amarilla en el Congreso local reconoció también que estiman perder un 10 por ciento de su militancia, y que esta sería recogida por el partido Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA), como saldo de la crisis de Ayotzinapa.
“Es innegable que se va a dar un flujo, lo normal, el flujo que se tenía previsto, pero espero que no sea tan grave, creemos que será un 10 por ciento podría emigar a Morena”, concluyó.
