El dirigente estatal del PRI, Pablo Fernández del Campo, consideró entendible el que la calificación que da la ciudadanía al gobierno del presidente de México, Enrique Peña Nieto, no sea aprobatoria pues las reformas que impulsó eran necesarias pero en principio también resultaban impopulares. No obstante, consideró que en unos meses más en que se vean los efectos positivos impulsados desde la federación crecerán los bonos del jefe del ejecutivo de la nación.
Esto tras publicarse la última encuesta del Buró de Estrategias y Análisis del Poder (BEAP) respecto a la evaluación ciudadana del trabajo de los tres niveles de Gobierno: Federal, Estatal y Municipal. La misma arroja que Peña Nieto obtiene un 5.48 de calificación y en materia nivel de confianza que inspira en los poblanos sólo alcanza una calificación de 5.13.
En este sentido el líder del PRI en el Estado indicó que ello no implica que se esté haciendo un mal trabajo. Por el contrario refleja que el mandatario tuvo altura de miras para entender que era más importante sacar adelante las reformas que cuidar su popularidad, sostuvo.
“Reconocer la altura de miras de Enrique Peña Nieto que tuvo una visión de estadista y que incluso prefirió sacrificar su bono democrático, su popularidad, aun sabiendo que las decisiones que se estaban tomando eran cuestionables y en algunos casos impopulares. Me parece que eso es lo que le correspondía hacer a un jefe de Estado, eso es lo que va a beneficiar al país y por eso los priistas lo apoyaremos”.
Descartó que esta baja calificación pueda repercutir negativamente en las próximas elecciones pues enfatizó que la percepción cambiará dado que progresivamente se verá el beneficio en la economía ciudadana que comprobará que el rumbo que se tomó fue el correcto, independientemente de que el mandatario federal ha hecho un intenso trabajo en materia de infraestructura y combate a la pobreza que también generará mejoras en la población.
