En la pasada reunión de la cúpula de mi partido, rumbo a la próxima asamblea, al parecer se avalaron sendos acuerdos que no dejan duda a la actitud entreguista de la dirigencia nacional a los intereses extranjeros y en donde las decisiones de la tecnocracia y los neoliberales más destacados hacen de las suyas, convirtiendo al otrora Partido Revolucionario en un híbrido tirado a la derecha.
Entre los acuerdos destacan la apertura a la inversión privada en materia energética, impulso a la competencia (sic) en materia de telecomunicaciones, cuando todos sabemos que quienes mandan en este país es el duopolio televisivo, entonces ¿Cuál competencia?
Qué le vamos a hacer, desde el CEN de mi partido se cierne la genuflexión y las actitudes de sumisión a los poderes de facto como el Banco Mundial, los intereses trasnacionales, las convivencias con el sistema neoliberal y quienes lo manipulan – desde el presidente nacional hasta el más sencillito miembro del consejo los llevará, con una desvergüenza ominosa, a tomar acuerdos en aras de “modernizar” al país en materia de aperturas al libre mercado, de nuestras áreas estratégicas, resbalándose en sus propias babas de mentiras que esputarán sin pudor, por el contrario, lo harán con una sonrisa en la boca, para recular y dejar en el olvido los acuerdos tomados en asambleas pasadas en materia del NO a la privatización de Pemex. Se tragarán sin saliva sus propias palabras y acuerdos y no permitirán el disenso porque hacerlo equivale a permitir la democracia que niegan en los hechos pero pregonan como si existiera.
Por otra parte, en Puebla, los advenedizos a modo ya se anotan, ahí están presentes, esos, los neo priistas que durante su corta estancia en el Revolucionario Institucional, buscan acomodarse para obtener una curul en la próxima legislatura, la más apetitosa de todas, casi cinco años de ir a calentar la banca para esperar las cómodas señales del morueco en turno y éste del morueco mayor. Asisten a reuniones, convocatorias, luchan por convertirse en consejeros del partido, aplauden lo que para otros priistas de cepa es afrenta y vergüenza: La actitud pendular de la cúpula hacia la derecha, el abandono de los principios revolucionarios que dieron vida y poder por más de setenta años a un partido que se ofreció demócrata con justicia social, aquel que en sus estatutos se encuentran las improntas ideológicas que le dieron vida a su esencia revolucionaria y que con el tiempo se fueron pervirtiendo hasta ser conocidos como los “Prianistas”, empero el presidente del partido en el estado, Pablo Fernández Del Campo difunde, propala voz en cuello “Este es un PRI incluyente, en donde todas las voces caben”. Demagogia pura.
La sumisión, la abyección, el “sí señor”, campean en este PRI de vuelta al poder, en donde no cabemos quienes nos oponemos a la ignorancia, a los aspirantes macarras y cutres a una curul, esa panda de chupópteros que tanto le reclamé al “Gober precioso” por su entronización, en donde no defenderán a sus representados, ahí están dos ejemplos vivos: la ex diputada anodina y zalagarda, de actitudes zafias y dócil a la hora de levantar el dedo o por el contrario, presta para sumir su testuz en su asiento cuando se lo ordenen, hoy miembro del comité político estatal de mi partido, arrastrándose con su sempiterna actitud de áspid para enrollarse en el cuello del novel y vulnerable presidente “Pablito” de quien llegué a creer se impondría para ser dignamente llamado “Don Pablo”, ¡Lástima!, más de lo mismo.
Siguiendo con la aspirante de marras, doña Blanca Estela Jiménez Hernández, le sigue otro camandulero de poca monta, prohijado por “Pablito” en sus aspiraciones para retornar al congreso, tan solo para cobrar su quincena y hacer dibujitos, mientras otros pretenden balbucear algunas palabras de nuestra política aldeana, Jorge Ruiz Romero, elementos ambos, que sirven exactamente para lo que el actual PRI necesita, la docilidad, la genuflexión y el Sí Señor, lo que usted ordene. ¡Arre, Arre! Tú la llevas “Pablito” diría León Felipe. Instituto político en decadencia y tirado a la derecha, ¡Arre!
*Consejero Politico Nacional del PRI (seguramente por muy poco tiempo más).
