La incorporación de nuevas tecnologías a los procesos de enseñanza aprendizaje, cada día cobra mayor importancia para la formación integral de los futuros profesionales; es por ello que la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla asume este reto al incorporar laboratorios de simulación en diversos programas educativos, uno de los más recientes es el “Aula de Simulación” que con tecnología de punta ya opera en de la Facultad de Estomatología.
Con la reciente apertura de esta “Aula de Simulación”, ésta unidad académica de la BUAP se ubica una vez más como referente en el país, al convertirse en la única institución en su tipo en México que incorpora a sus modelos educativos y procesos de evaluación, laboratorios de simuladores apoyados de monitores, equipos y maniquíes con tecnología de punta que favorecen la formación integral de sus egresados.
Este nuevo espacio académico, ofrece la oportunidad tanto a estudiantes como académicos alcanzar competencias en procedimientos invasivos, sin riesgo hacia los pacientes, por lo que se prevé que el uso actual y futuro de estas nuevas tecnologías reemplazará al modelo tradicional, ya que permite el desarrollo de habilidades y destrezas para la toma de decisiones y autonomía.
Tecnología de Punta destinada a la enseñanza
En un esfuerzo extraordinario, la Facultad de Estomatología de la BUAP logró la adquisición de 22 unidades de tecnología japonesa, equipadas con monitores, CPU’s y maniquíes cuyas características son similares a los seres humanos, con respecto a órganos dentarios y tejidos blandos en la cavidad oral, así como simuladores de técnicas de anestesia con sensores digitales, que indican si se está trabajando en el punto anatómico apropiado.
Son equipos que permiten la práctica simultánea de los alumnos durante una hora clase, en la que el maestro imparte el curso desde su cubículo, a través de un espacio virtual.
El doctor Rafael Martínez Hernández, Coordinador de Educación Continua de la Unidad Académica, señaló que se trata de una inversión única y de largo plazo, debido a que la tecnología del equipo permite su actualización, por lo tanto, no se vuelve obsoleto y tiene la flexibilidad para que los alumnos trabajen en las diferentes áreas de Estomatología.
La doctora Alejandra Sotomayor Castilla, Coordinadora del Aula de Simulación de la Facultad de Estomatología de la BUAP, dio a conocer que la instalación de este nuevo espacio, tiene la finalidad de que el alumno desarrolle un autoaprendizaje que va desde la percepción sensorial y selectiva, al procesamiento de asimilación de la nueva experiencia en concordancia con sus conocimientos previos.
“La finalidad, es que el alumno desarrolle todas sus habilidades y competencias en un maniquí, para que posteriormente las pueda transmitir en la clínica como tal y en su ambiente laboral más tarde”.
Sotomayor Castilla abundó que se trata de un proceso que incorpora las tecnologías de la información, en donde el maestro imparte su clase a través de un monitor, desde su cubículo a los alumnos del laboratorio, modalidad que motiva el desarrollo de sus autonomías, debido a que la simulación permite acelerar y mejorar la calidad del proceso de aprendizaje (integrador, sistémico y ordenado).
“El Aula de Simulación permite que los estudiantes participen en diversas prácticas, de acuerdo a sus asignaturas, entre ellas la práctica de órganos dentarios, el aislamiento del campo operatorio, manejo de tejidos blandos, que ayuda a que los alumnos aprendan a suturar, poner implantes, e incluso a anestesiar, es decir, a desarrollar un manejo integral del paciente”.
La académica, dio a conocer que a la fecha se han incorporado ocho grupos de 44 alumnos, y se cubren cuatro asignaturas de distintos cuatrimestres; además de que se utiliza material de última generación, para que el alumno esté actualizado en los últimos avances de la estomatología.
Fortalecimiento en los procesos académicos de aprendizaje
Este espacio incorpora la tecnología al proceso académico, para que los alumnos tengan conciencia de temas relacionados con la bioseguridad, el control de infecciones y la educación a la salud; con el objetivo de que el estudiante desarrolle habilidades y competencias de una manera autónoma en la resolución de un aprendizaje basado en problemas reales.
El Doctor Martínez Hernández, destacó la importancia que tiene para los alumnos, desde el inicio de su carrera, trabajar en el área de laboratorio, como lo hacen los alumnos de semestres posteriores en las clínicas; debido a que los simuladores, como su nombre lo indica, ofrecen condiciones semejantes a las que se pueden llegar a enfrentar con un paciente.
La tecnología con la que están construidos los maniquíes permiten a los alumnos aprender a anestesiar, realizar diversas prácticas y detectar errores que ya no cometerán en la clínica con la atención en pacientes reales”.
Bruno Fabián Díaz Lara, estudiante de Estomatología de la BUAP, puntualizó que “trabajar con esta tecnología da mucha seguridad, porque no trabajamos directamente con un paciente mientras estamos aprendiendo las técnicas básicas; con este nuevo equipo el aprendizaje es más fácil y más seguro”.
Adriana Herrera, quien estudia el cuarto cuatrimestre, comentó que “son muy buenas estas prácticas con simuladores, porque nos preparan para el trabajo en clínicas y ya vamos listos para atender a un paciente; no sólo se trata de un maniquí, llevamos preparación en barreras y técnicas, el equipo es muy parecido al de las clínicas, la única diferencia está entre el maniquí y el paciente”
Karen Ortega Álvarez, también estudiante de Estomatología, habló de la experiencia de realizar sus prácticas con un maniquí que simula problemas y reacciones de un paciente y aseguró: “se me hace súper padre que la BUAP tenga tecnología de punta, me considero muy afortunada de estudiar aquí”.
El Coordinador de Educación Continua destacó la capacitación que han tenido y tendrán los docentes de la Facultad de Estomatología para el uso de este equipo; en breve se recibirá a profesores invitados de la Universidad Autónoma de Nuevo León, quienes trabajan con esta tecnología, “además de la capacitación al profesorado que ofrece la empresa proveedora de estas tecnologías, lo que redundará en un mejor aprovechamiento de las nuevas tecnologías para el aprendizaje”.
