No, no busco ahondar la polémica hecha por nuestro honorable Secretario de Hacienda, Ernesto Cordero. Dicha historia ya tuvo su propia evolución –y castigo- a través de las redes sociales y los medios de comunicación.
Retomé el hecho para enfatizar los descubrimientos que hice a raíz de una reciente búsqueda de empleo en algunos importantes portales –para nivel medio y profesional-como Occ.com.mx.
Lo anterior, porque una amiga que sólo tiene la prepa y tiene tres hijos, desea un trabajo de medio tiempo para ayudar a los gastos del hogar, pues con un sueldo, poco alcanza.
Entiendo que muchos pueden pensar que por la falta de preparación académica, poco se puede aspirar a un puesto gerencial, pero recordemos que la prepa, es el único grado académico que tienen muchos hombres y mujeres en el país.)
Mi sorpresa fue ver empleos de “medio tiempo” (muchos eran de siete de la mañana a tres de la tarde, una jornada completa de ocho horas), con remuneraciones de $2,500 o hasta $1,400 pesos mensuales.
Esto después de bucear entre el mar de trabajos de ventas sin sueldo base y con comisiones, o los que a todas luces se ven que son un timo y que antes de darte ‘el sueldazo’, te ponen a vender perfumes.
En el caso de mi amiga, afortunadamente ella tiene el sueldo de su esposo y lo que buscaba era ayudar, pero ¿cuántas madres solteras o profesionistas frustrados por no encontrar empleo en años, aceptan estos sueldos de miseria?
¿Realmente alcanzan para vivir, para medio vivir, para sobrevivir siquiera?
Estamos en el sexenio del empleo, según lo prometido en campaña por el Presidente Calderón. Constantemente se publican estadísticas del IMSS, en las que se aseguran, se acrecentan las inscripciones a dicho instituto, siendo ése el principal parámetro para medir el empleo en el país.
Lo que las autoridades no revelan es que, no importa el récord de nuevos empleos, sino el que son malos empleos, insultantes empleos, míseros y risibles empleos, no por las actividades a desarrollar, sino por los sueldos percibidos.
¿Eso qué hace por la economía? ¿Realmente los empleadores, los empresarios, los altos mandos de las decisiones financieras del estado y del país, creen que con estas cifras en las familias, pueda circular con bien el dinero y mejorar el entorno económico?
Ya no digamos para pagar escuela privada, auto, hipoteca y súper…. ¿Servirá para solventar las cuotas de uniformes y de padres de familia que piden en escuelas públicas, para el camión o metro, para la renta de algo que nunca será propio y para mal comer?
Esa, es la realidad de millones de mexicanos, y las clases altas creen que no les afecta, pero todo está interconectado y todo es un círculo que se regresa.