Al día siguiente, Juan vuelve a preguntar:
-¿Sabes, Pedro, quién es Albert Einstein?-
-No, Juan, ni idea-
-¡Qué tonto eres! Deberías ir a la nocturna-
Otra vez, siguiente día, el mismo obrero pregunta:
-¿Sabes quién es Karl Marx?-
-Pues no- contesta el otro con cierto fastidio.
-¡Pues qué tonto eres! Deberías ir a la nocturna-.
Entonces Pedro, ya harto, le dice:
Y tú, Juan ¿Sabes quién es Pedro Toro?
-Ah, caray, no pues no- contesta Juan, confundido.
-¡Pues qué tonto eres, Juan, porque Pedro Toro el tipo que se acuesta con tu mujer, mientras tú vas a la nocturna-