Fue el jueves 3 de julio del 2008 en una comida privada, realizada en la calzada Zavaleta, en la famosa calle de Los Judas, concretamente en la casa del empresario Emilio Gómez.
Ahí acudieron alrededor de 40 empresarios poblanos, quienes además de reconocer logros de su gobierno se dieron el lujo de hasta cantarle las mañanitas.
Gabriel Huerta tomó el micrófono para endulzarle el oído al mandatario estatal con distintas melodías.
Si se pensaba que la relación entre el gobierno de Mario Marín y la cúpula patronal correría la misma suerte que otros sexenios quedó claro que no.
La cúpula patronal ratificó su alianza y así lo manifestaron con su presencia en la comida que encabezó Gabriel Huerta Ortega, presidente del Consejo Coordinador Empresarial.
Asistieron aquel día: Claudio Valdés García Teruel, líder de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción; Armando Adame Sosa, ex dirigente de la CMIC; Antonio Garay Orea, presidente de la Cámara Nacional de Comercio; y Charles Mtanous Aboud, mandamás de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación.
En la lista de invitados figuraron también Yraclis Pshihas Valdés, Mariano Romero Beristian, José Luis Piñera de al Fuente, Eduardo Kuri, Alejandro Couttolenc Villar, Edgar Nava y Oscar García –consentidos del marinismo-, Manuel Orbezo, José Luis Hernández Cano.
Además, José Luis Hernández González, Miguen Ángel Hernández González, José Luis Hernández González, Juan Carlos Sánchez, Jorge Cabrera Mena –operador en el sector de la construcción de don José Antonio Quintana Fernández, líder de El Yunque en Puebla, Armando Ortíz Martínez, Javier Osorio Escamilla, Alberto Ramírez y Ramírez, Salvador Padilla Koeninger, Ricardo Pérez Guemes, Sergio Márquez Espinosa, Gustavo Vargas Constantini, Jesús Luis Islas, Arturo Salas, Alberto Pereyra, Fernando Espina, César Cruz, Jorge Uriarte, Ricardo Carrera, José Antonio Moreno Valle, Enrique Sánchez, Manuel Corte, Mario Mendivil, Juan Pablo Cordero, Héctor Sánchez, Jaime Menéndez y Carlos Iglesias.
LAS PALOMAS…
Al gobernador se le notó muy contento aquel día.
Y hasta la fecha sigue.
No esperaba la presencia de los líderes de la cúpula patronal, quienes dejaron constancia de su interlocución.
Fue tras el escándalo Cacho-Marín. La cúpula si bien dio su respaldo político al mandatario y espero la resolución de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, evitó en todo momento aparecer en festejos y en actos como la celebración de su cumpleaños.
Las palomas dominan a la iniciativa privada en el invierno marinista.
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