Con el apoyo de un diputado de Nueva Alianza, del Partido del Trabajo y de Convergencia, la fracción priísta impuso su reforma electoral en la que contempla la homologación de procesos a partir de julio del 2013 y no del 2010, por lo que dirigentes y legisladores de los partidos Acción Nacional, de la Revolución Democrática y Nueva Alianza anunciaron que impugnarán el resolutivo ante la Suprema Corte de Justicia (SCJN).